viernes, 7 de julio de 2017

Voy a salir del armario, pero no de la forma que esperas

Aunque aún quede mucho camino por recorrer, la verdad es que la sociedad cada vez acepta más el hecho de que haya gente homosexual y bisexual. Es cierto que la heteronormatividad sigue siendo el pan de cada día y que continúa habiendo gente del colectivo LGTB que recibe amenazas y agresiones, pero por suerte la mentalidad general va mutando hacia el buen camino.

A raíz de todo esto hace unos meses me empecé a plantear si en cambio de ser hetero podía ser bisexual. La homosexualidad la descartaba completamente porque no puedo negar que los hombres me gustan, así pues barajaba seguir como siempre o que también me gustasen las mujeres. Empecé a investigar y no mucho después entendí que para ser bisexual no necesitas que te gusten las mujeres un 50% y los hombres el otro 50%, sino que depende de la persona se puede sentir más atracción para un género o para el otro. Y llegué al siguiente pensamiento: alguien que se autodenomina hetero pero que ha sentido alguna vez atracción por una persona del género opuesto al suyo, aunque solo fuera  UNA sola vez en su vida, resulta que ya no es hetero (oh, vaya, sorpresón) sino que es bisexual. Porque el ser hetero significa que únicamente te gusta el otro género (100%). Solo que haya un 1% de atracción  hacia tu mismo género... ¡tachán! La bisexualidad llama a tu puerta. Por lo que acabé decidiendo que yo era bisexual (y creo que la mayoría de nosotros lo somos, pero muchos no lo aceptamos).

Pero la verdad es que mi búsqueda no acabó aquí. Porque mientras me informaba sobre la bisexualidad hablé con mi mejor amigo y para ayudarme a entenderme me preguntó cosas como "¿te atraen las mujeres?" a lo que yo respondí: "nunca me han venido ganas de mantener relaciones sexuales con mujeres, pero podría mantener una relación sentimental con ellas". Y a partir de ese razonamiento mi cerebro comenzó a dar vueltas y a mover recuerdos, sensaciones y pensamientos. No siento atracción sexual hacia las mujeres, pero... ¿La siento hacia los hombres? 
He tenido sexo con hombres, y aunque no todas mis experiencias han sido satisfactorias, muchas de ellas lo fueron. Pero, que haya mantenido relaciones sexuales con hombres no quiere decir que sienta atracción sexual hacia ellos. Y entonces recordé todos los problemas con anteriores parejas. "No quieres follar porque no te pongo", "no me haces sentir deseado", "hoy tampoco quieres hacerlo". Parece que mi subconsciente haya querido borrar estos momentos, pero a la que remuevo un poco salen a la luz sin dificultad. Desde mi primera pareja hasta la última he tenido problemas a la hora de mantener relaciones sexuales. Nunca me apetecía, porque resulta que nunca he sentido atracción sexual hacia nadie. Y eso lo sé ahora, tras meses escuchándome (al fin), y ojalá lo hubiera sabido hace 7 años.

Resulta que lo que yo sentía (y creía que era atracción sexual) era lo que conocemos como libido. Eso que hace que un día te levantes cachondx sin motivo alguno. Y, en mi caso, sobretodo me ocurre cuando estoy ovulando. Como jamás he sentido atracción sexual hacia nadie, confundía esa sensación de la libido con la atracción sexual de la que todos hablan.
Así pues, volviendo al tema del principio, para mí las palabras "heteroSEXUAL", "homoSEXUAL" y "biSEXUAL" carecen de sentido. Resalto la segunda parte de las palabras porque evidentemente cuando alguien se define con alguna de ellas es porque siente atracción sexual por el género en cuestión. ¿Pero y cuando no sientes atracción sexual entonces qué? Pues amigos y amigas míos, eso se llama asexualidad. ¡Y es otra orientación sexual! ¿Habíais oído hablar de ella? Pues existe, y os voy a contar un poco más sobre el tema, ya que me he leído un montón de información para, por fin, entenderme a mí misma.



Os lo voy a explicar de una forma fácil, rápida y para toda la familia (o como mínimo lo voy a intentar). Para ello os presento el triángulo de AVEN, el cual incluye la escala de Kinsey que nos muestra la atracción hacia géneros (hetero/bi/homo).
Como se ve en el triángulo, además de la escala de Kinsey donde podemos ver lo que comentaba antes sobre la heterosexualidad, la atracción sexual que sentimos la podemos clasificar desde la alosexualidad hasta la asexualidad. 
La alosexualidad es precisamente lo "normal" (lo que vemos en todos sitios, vaya, porque "normal" no hay nada al fin y al cabo): sentir atracción sexual hacia otras personas. Si por el motivo que sea no sientes atracción sexual hacia otras personas (ya sea en ocasiones específicas o en general) entramos en el espectro de la asexualidad (en el 'área gris'). En esta área gris (también conocida como grisasexualidad) encontramos la demisexualidad, la fraisexualidad, la reciprosexualidad, la acoisexualidad, etc. Así por encima os puedo explicar que la demisexualidad es sentir atracción sexual únicamente cuando tienes una conexión emocional con alguien; la fraisexualidad es justo lo contrario: sentir atracción sexual por alguien y perderla cuando llegas a esta conexión emocional; la reciprosexualidad es sentir atracción sexual por alguien cuando sabes que la otra persona siente atracción sexual por ti; y la acoisexualidad es lo contrario a esta última: sentir atracción sexual cuando la otra persona no siente atracción sexual por ti. 

Y en la parte más oscura, estamos los asexuales. Los que no experimentamos atracción sexual en ninguna ocasión. Si os habéis fijado siempre digo "atracción sexual" porque precisamente estamos hablando de sexualidad, no de romanticismo. Por esta misma razón tenía yo la duda en la cabeza de si era bi o hetero. Porque yo podría mantener una relación sentimental tanto con un hombre como con una mujer, ya que ninguno de los dos me atrae sexualmente pero sí de forma romántica. Así pues los asexuales podemos sentir otro tipo de atracciones: estética, romántica, intelectual... pero no sexual. 
¿Podemos mantener relaciones sexuales? Depende. Cada persona es distinta, y puede que haya asexuales que prefieran no tener sexo, igual que otros podemos decidir tenerlo por distintos motivos. 

Ahora me siento mucho más tranquila, sé quién soy, sé que no me ocurre nada y sé que no estoy sola. Y precisamente porque sé que hay mucha más gente como yo he decidido escribir esto. Los asexuales existimos. Estamos escondidos entre esta sociedad que cada vez muestra más sexo y nos hace sentir unos bichos raros y que si no mantenemos relaciones sexuales con nuestra pareja estamos destinados al fracaso sentimental. Dejadme que os diga una cosa: cada uno vive su vida como quiere, y vosotros no sois nadie para decirle a los demás cómo tienen que vivir la suya.

Si queréis saber más sobre asexualidad podéis pinchar aquí.

sábado, 20 de agosto de 2016

Lo prometo

Cuando sólo supe mirar atrás y reconocer los errores del pasado; cuando el sol ya no salió para mí; cuando las estrellas dejaron de iluminar la oscuridad y la luna se fundió...

Cuando el faro no recordó qué guiar; cuando los barcos perdieron el rumbo; cuando los peces se olvidaron de nadar; cuando las nubes no dejaron de llorar...

Cuando las montañas perdieron su color; cuando los árboles no bailaron con el viento; cuando las flores se quedaron sin pétalos; cuando las abejas abandonaron la colmena; cuando los pájaros enmudecieron...

... recordé esas palabras que me dijiste aquella vez. Esas palabras que pareció que no escuchaba y que pensaste que ignoraba... pero que sin embargo guardé aquí, bien adentro.

Cuando pienses que todo ha acabado y que ya nada será lo que un día pudo ser... piensa en mí. Piensa en todo lo que te quise, y en lo que te querré. Recuérdalo por encima de todo, promételo.

sábado, 2 de marzo de 2013

Ferides

De tant mirar-me els peus he deixat de contemplar el cel. Perdona'm, lluna, per haver-te deixat sola en la immensitat de la nit.
M'he adonat que havia canviat el rumb, i a l'haver-te perdut com a referent no he pogut entendre que m'estava allunyant d'allò que volia perseguir. Tu m'has fet retrobar el camí, altra vegada.
Surts cada nit, brilles i destaques entre milions d'estrelles. La gent t'adora. Tot i estar plena de cràters, ferides causades pels cops dels meteorits, els llueixes com si fóssin joies, no els amagues: són part de tu.
Les teves marques et fan més rica, més maca. Ara ho he entès.



lunes, 24 de septiembre de 2012

Calla

Sempre he volgut tenir un seient al costat de la finestra on poder-me asseure i observar les nits estrellades que tan sovint se m'escapen.
Sempre he desitjat anar a la platja quan no és temporada i quedar-m'hi per escoltar el trencar de les onades.
Sempre he anhelat passar la tarda ajaguda a la gespa d'un parc i no marxar fins que sigui fosc.
Moltes matinades he tingut la necessitat de sortir al carrer i donar una volta només per donar-la.

Potser un dia em convertiré en flor per voler ser tan contemplativa, però m'he adonat que la majoria de gent no es para a veure el que té, i després ploren quan ho perden. Qui no parla, escolta. I qui escolta s'assabenta de coses que qui no calla no sabrà mai. I no em refereixo només a allò que es diu i els altres no entenen, sinó també a allò que es calla però que és inevitable mostrar.

Calla, observa i escolta. El silenci és d'aquelles coses que s'han d'aprendre a apreciar i a entendre.

martes, 18 de septiembre de 2012

La lluna

De petita, quan anava en cotxe i era de nit, sempre buscava la lluna i la mirava fixament. Li parlava en veu baixa o pensava creient que ella m'escoltava des d'allà dalt.
No parlo d'una lluna com la de Oso de la Gran Casa Azul ni com el sol dels Teletubbies, però en molts moments crucials m'ha ajudat a retrobar-me. És el meu punt de fuita. La miro, com brilla i il·lumina, com creix i decreix i, fins i tot, com alguna vegada es resisteix al fet de marxar i es queda durant el dia. 
La miro i reflexiono. Ella al cel, jo a terra. Ella tan gran, jo tan petita. Però tot i les nostres diferències també ens trobo semblances: totes dues som solitàries tot i estar envoltades d'altres cossos, uns dies brillem més que uns altres, uns dies ens sentim més grans que uns altres, fins i tot alguns dies és com si no hi fóssim si algú no ens il·lumina.
Ella, sense dir-me res, m'ho diu tot. Si mai estic trista, ella és allà per fer-me entendre que la vida continua, que després de la foscor tornarà a aparèixer i de mica en mica tornarà a brillar. 

Avui, que li falta poc per desaparèixer, el cel està ennuvolat. Pero jo sé que ella és allà, i que està disposada a tornar a començar.

Jo també estic disposada a tornar a començar, només necessito algú que m'ajudi a brillar.

I wish I was the moon, tonight



jueves, 31 de mayo de 2012

Quan vols plorar

Què passa quan dius que vols plorar?
La meva resposta si mai algú m'ho pregunta és clara: "doncs plora". Però si ho penses, la resposta  típica d'aquell qui t'escolta serà alguna cosa com: "no, dona, no ploris, segur que no val la pena". I llavors jo em qüestiono, per quin motiu no hauries de fer-ho?

És típic creure que plores perquè estàs trist, però tothom sap que també es pot plorar d'alegria. Jo, cada vegada que ric, ploro. I si quan dic que vull plorar m'estic referint que vull que em facin riure fins que em surtin les llàgrimes?

També existeix el plorar d'emoció. Si t'agraden les arts o la literatura (potser et passa amb les matemàtiques, però en el meu cas això ho veig massa llunyà) potser plores davant un magnífic quadre que et mories de ganes de veure, o al veure un espectacle de dansa i adonar-te de les ganes i l'esforç que hi dediquen els artistes a l'escenari. I si quan dic que vull plorar m'estic referint que vull veure un espectacle i que m'arribi fins al cor?

Plorar d'alegria és maco, et fa sentir feliç ni que sigui per un petit instant, i plorar d'emoció t'ajuda a valorar aquelles coses que a simple vista no semblen tenir importància, però plorar de tristor no té perquè ser dolent.
Vull dir, si et sents apesarat i tens un nus a la gola que et demana plorar, fés-ho. Quan vols plorar és perquè ho necessites, i no t'has de reprimir. Plora, ja sigui de felicitat, d'emoció, de ràbia o de tristor. Plora i no t'ho quedis, perquè hauràs alliberat estrès i, a més, segons la Viquipèdia, plorar pot reduir els sentiments negatius en un 40%.

Plora, ni que sigui perquè els teus ulls estiguin ben hidratats. Plora si pots, perquè el vertader problema és no poder fer-ho. Plora abans que un dia et preguntis per quin motiu no et surten les llàgrimes si tens un pes a dins que no s'aguanta. Plora davant dels altres quan vulguis plorar i, si et diuen que no ho facis, explica'ls tot això.

sábado, 31 de marzo de 2012

Temps

Un dia et lleves i t'adones que tot al teu voltant ha canviat. No saps quan ha passat, però ha passat.
Retrobes aquell últim intent de diari personal que vas crear dos anys enrere i llegeixes allò que en el seu moment hi vas escriure. Rius. Escrius una nova pàgina explicant que tot és diferent, que ets una altra persona. I saps que has fet bé, tot i que et sents buida. 

Rellegint les pàgines on explicaves el que et passava pel cap el 2010 entens que el que tens ara és fruit del procés lògic del temps. I tu creies que havies pres grans decisions... Però en realitat, si haguessis estat una mica més espavilada, hauries sabut que aquell era el destí que la vida et tenia preparat.

Ara, mentre acceptes que del passat només tens records i que en conserves poc, tens ganes de plorar. Però entens que has d'avançar per poder treure alguna cosa de profit d'aquest canvi. Tot i així, per més que sàpigues que dintre d'un temps haurà valgut la pena, ara tens por. Et sents sola. I per més que et diguin que no t'hi has de sentir, t'hi sentiràs.

En moments així, ni la xocolata pot fer res.